martes, 2 de marzo de 2004

LA COLUMNA CANALLA

Por F.G. desde Arroyito.
Otro Empate Agónico:
Tan sólo tres días después del milagroso gol de Messera que le dio la igualdad a Central ante Sporting Cristal en el Gigante, la historia pareció reencarnarse en San Martín, pero con el Oveja Talamonti como el héroe de la jornada (no sólo por el gol si no por su gran actuación) y con un Central dejando nuevamente muchas dudas en su funcionamiento, sin poder superar a un rival muy débil, pero sacando un punto de la galera en un encuentro que se le había hecho por demás de difícil. Es que el supuesto equipo alternativo que iba a presentar Russo no terminó siendo tal, ya que de la formación base de Central, solamente faltaban Herrón, Vitamina y Belloso, por que con las últimas actuaciones de Raldes, la presencia del Petaco Carbonari no está garantizada. Por lo tanto, aunque los jugadores ausentes son muy importantes para el equipo, no es excusa posible la composición del mismo. Y menos aún si tenemos en cuenta que enfrente estaba Chacarita, un equipo vapuleado anímica y futbolísticamente, que venía de sufrir dos derrotas consecutivas, con la frustrante marca de un gol a favor y ocho en contra en sus dos presentaciones.
Pero los de Garisto no fueron temerosos en el inicio y salieron a meter a Central contra el arco de Gaona. Y fue así como, de manera muy desordenada pero con mucho amor propio, el tricolor era el que disponía de las mejores chances en un partido que se mostraba chato y de un escaso nivel técnico. El único recurso del local parecía ser la pelota parada, por la cual acercaba peligro por intermedio de Furios, Pena y Piersimone. Central, en tanto, no lograba encontrar el balón y se veía sometido a un asedio de los de Garisto, que sin embargo no presentaban ideas claras para jugar. Y fue justamente en una pelota detenida como Chaca encontró la apertura. Luego de un centro de Pompei, el boliviano Ronald Raldes agarró del pantalón a Iván Furios en el área. No dudó Juan Pablo Pompei en la sanción, mucho menos Pena en la ejecución y el funebrero encontraba una ventaja que premiaba al equipo que había insinuado un poquito más. A partir de allí y para cuidar la ventaja, Chacarita retrocedía cada vez más en el terreno a medida que pasaban los minutos. Fue por eso que Central comenzó a hacerse dueño del balón y a hacerlo circular en el mediocampo, pero otra vez tuvo problemas en la generación de juego y no pudo entrarle a la defensa tricolor en toda la primera etapa. No fue una buena tarde del mediocampo auriazul, ya que sólo Mariano Messera mostró ráfagas de buen fútbol, mientras que Papa se vio bastante impreciso y el tándem Acuña-Ruggiero (volante central y carrilero derecho respectivamente) no estuvo a la altura de las circunstancias. De todas formas, Central no sufrió más avances claros de Chaca hasta el minuto 45 de la segunda parte. Como decíamos antes, el local optó por replegarse y la única salida clara la encontraba en el sector derecho a través de su mejor hombre, Diego Rivero, que con su velocidad le hizo pesar el largo tiempo de inactividad a un Juan Pablo Cárdenas que pareció no estar en forma física y futbolística aún para la alta competencia.
La segunda mitad fue un calco del final de la primera, aunque con Central un poco más cerca del área local. Igualmente, seguía sufriendo los mismos problemas en la creación y sólo se aproximaba vía centros. Por eso Russo mandó a la cancha a Gustavo Lorenzetti y posteriormente a Pablo Vitti, quienes le aportaron mayor dinamismo al ataque auriazul y demostraron que pueden ser muy útiles en caso de que el técnico los requiera. Parecía que nos volvíamos de San Martín con la tercer derrota al hilo, pero en el minuto 42 llegó la salvación. Centro de Matías Irace (también ingresado en la segunda parte) y la aparición de la figura de la cancha, Leonardo Talamonti, que con un cabezazo al segundo palo hizo estéril el esfuerzo de Leo Fernández y decretó una igualdad que puede resumirse como justa, por que, jugando mal y todo, Central la buscó hasta el cansancio.
Los últimos cinco minutos (descuento incluido) fueron de ida y vuelta y hubo una ocasión para cada lado. Pero el marcador no se movió y permitió a Central sumar su primera unidad en este Clausura. Habrá que mejorar muchísimo el rendimiento colectivo para el partido ante Curitiba (seguramente los re-ingresos de los jugadores reservados ayer puede cambiar algo) y volver como sea a sumar de a tres. Lo positivo de la jornada fueron las buenas presentaciones de los juveniles Lorenzetti, Vitti e Irace, estos dos últimos debutando en Primera, que demostraron que las inferiores canallas no se cansan de dar frutos y que en definitiva siempre son las que salvan a nuestro club.

Figuras Canallas

Leonardo Talamonti: Sin lugar a dudas, lo mejor de Central en lo que va del 2004. Sigue sacando todo del fondo, mostrándose tranquilo, prolijo y muy seguro. Hoy se hizo cargo de la defensa, no tuvo inconvenientes en controlar a Piersimone y además se dio el gusto de convertir el tanto del empate y de esa manera sumar su cuarta conquista en Primera División.
Una vez más felicitamos al Oveja por sus altos rendimientos y de seguir así no hay dudas que tiene futuro europeo y por qué no, de Selección.
Mariano Messera: El reconocimiento al jugador que más intentó en ofensiva por el lado de Central. Tuvo algunas apariciones buenas, otras no tanto, pero corrió muchísimo durante todo el encuentro y fue el único jugador capaz de generar peligro mediante acciones individuales.
Terminó cansado, pero seguramente estará el jueves ante los brasileros para seguir demostrando por qué es tan importante en este Central.

Los jugadores Canallas festejan el empate.