lunes, 30 de octubre de 2006

LA COLUMNA DE ELIANA

Por Eliana Rivero
(Alumna 1er.Año ISEC)

Rosario Central 4-1 Newell`s

Una vez mas se ha jugado el partido mas esperado por todos los rosarinos hinchas de central y newell. El clásico con más pasión y fervor, después del Boca- River. En el momento del partido, no importan las fechas anteriores, importa la garra de cada jugador y el aliento de las hinchadas que motiva a los jugadores a dejar todo y más por el orgullo y la gente.
En el primer tiempo Central estuvo mucho mejor parado, tuvo muchas situación, y las pudo definir sin complicaciones.
Se notaba al equipo ordenado y con muchas probabilidades de gol. Y así fue como a los 18 minutos del primer tiempo, con un pase de Borzani, Wanchope agarra la pelota, pega la vuelta, pase para el Chacho y golll de Central.
En ese momento Newell perdió la estabilidad y se encontro perdido, no llegaba a concretar pases. Por eso es que los canallas se privilegian y convierten el segundo gol, el primero de Wanchope en un clásico. El Gigante de Arroyito ya era una fiesta, pero no todo se suspendía ahí, faltaba otro gol, el de Marco Ruben. Los jugadores se fueron a los vestuarios tranquilos, pero las tribunas eran otra cosa, cantito de acá cantito de allá y las bengalas que no dejaban de hacerse notar con sus colores azul y amarillo.
En el segundo tiempo, cambio un poco el juego dentro del campo, Central se confió mucho, eso le cayó en contra, se notó desprevenido, y bastante perdido. Como consecuencia Newell anota el primer y unico gol.
La violencia aparecio pero esta vez en muy poco tiempo, hubo indicentes y tiros entre la policía y la hinchada visitante, el arbitro Elizondo intervinio en la situacion, como también lo hizo Nery Pumpido. Pero en pocos minutos todo volvió a la normalidad. El partido iba 3-1 hasta que un penal a favor del local, con un episodio confuso entre el árbitro y 2 jugadores de los leprosos. Llevó a la expulsión de Torren, pero la confución llevó a Elizondo a corroborar con el juez de linea, y finalmente expulsó a Colace y no a Torren.
Penal para Central, patea el Kily Gonzalez, si esta vez lo convirtió, y Rosario terminaba en fiesta. Aunque el partido ya se había tornado aburrido, con idas y venidas, el gol permitio despertar y volver al festejo.
Central no convertía 4 goles en un clásico desde aquel famoso 4 a 0 y abandonó en el que el Chacho Caudet festejaba por primera vez el baile stone.
Si Rosario fue una fiesta en la que Central y sus 4 goles fueron los protagonistas principales, un sello mas, a esta historia tan larga de recuerdos entre Newell's y Rosario Central.


Kily Gol. El capitán Canalla festeja el cuarto, de penal.


Gol del Kily. Así se vivió en Buenos Aires.