jueves, 23 de junio de 2005

COPA LIBERTADORES




Rogerio festeja, Diogo sufre.


Mascherano, en la lucha.

Astrada apostó todo a la Copa Libertadores... Está bien. Pero descuidó (demasiado) el torneo local. Si ahora no pasa de ronda (lo que es probable, teniendo en cuenta que le tiene que meter tres goles al San Pablo y rezar porque los brasileros no la metan ni de penal), no sólo perdió todo lo que jugó, sino que tiene comprometida la clasificación a la próxima edición de la máxima competencia que reina en este pobre hemisferio.