DESDE LA CORDILLERA

Por H. F.
COBRELOA, BICAMPEON. A costa de Colo-Colo (nuevamente), Cobreloa ganó el campeonato (nuevamente). En un reinaugurado estadio Monumental (arreglín, para variar), los naranjas ganaron de visita al cacique por 2 goles a 1, donde la figura del partido fue, sin dudas, Jaime González. En exclusiva para ElOleg, el goleador loíno nos dijo: “les anticipé que iba a hacer un gol y al final hice dos...fueron de baby-fútbol, como a mí me gusta”. Luis Garisto, uno de los pocos DT que renuncian fechas antes y prometen lo que cumplen (salir campeón) se va con la frente en alto y con un sabor dulce en la boca: haber retomado con éxito lo hecho por el pelado Acosta, actual (¿o ya no?) DT de la selección boliviana. Me acuerdo que este Cobreloa le anduvo amargando la tarde en muchos pasajes al campeón del mundo, Boca Juniors, en la pasada libertadores; también, que tuvo la valla menos batida y la delantera más efectiva; también que en sus filas (todos los puestos) poseen a jugadores que jugaron casi en todos los partidos; también el mejor rendimiento de local y de visita; también, el premio fair play; también, están con los sueldos al día; y también, que son bi-campeones...¿qué más se puede decir? Sólo felicitar a este equipo que ha demostrado un buen nivel de juego proyectable en campeonatos internacionales. Para el postre, en este instante me acuerdo de jugadorazos que sólo en Calama han sabido demostrar lo que algún día fueron: Sergio Díaz, Ligua Puebla, Jorge Siviero, Mario Osbén, Mario Soto, etc., etc., etc.; es que he sido egoísta con el tremendo cielo lleno de estrellas que se prenden en el norte y que en la altura muestra su poderío: ¡gracias y salud, Cobreloa! De Colo-Colo siempre hay que decir que para jugar una final y perderla, hay que llegar. El indio, a lo largo de todo el campeonato, supo luchar contra una serie de fantasmas que le ligaban y achacaban el poder seguir más adelante con tranquilidad y convencer a los exitistas de siempre los cuales me he referido en más de una ocasión (sin ir más lejos, la semana pasada); pero insisto que lo más grave es el abandono de su hinchada...imperdonable, ni siquiera ayer se repletó el recinto a pesar de estar a las puertas de un título: ¿es que los hinchas albos se achancharon? Yo sabía que eso pasaba en San Carlos de Apoquindo solamente. Igualmente, digno es comentar que frente a la adversidad Colo-Colo de la mano del DT Pizarro mostró algo que “otros” no tuvieron: huevos. Del resto y del balance de este año futbolero 2003...mmmmm, ya sé: que se vayan todos, sin excepción, a la misma mierda, en especial esos “genios” dirigentes, jugadores, hinchadas, cuerpos técnicos y vendedores de maní con cáscara (hueco por dentro) y café de máquina tibio (cuando los 0ºC pedía uno hirviendo).
A mi fiel público les anticipo que volveré la próxima semana con la serie de cuentos, entrevistas y rumores, llamado: “Balances”. No se lo pierdan.

Luis Fuentes muestra el trofeo... el defensa convirtió un gol importantísimo en la final.